sábado, 3 de mayo de 2014

Giros de la vida...Capítulo 4



                                                                   Capítulo 4

Todo lo que me rodea es una completa oscuridad. Estoy sola sentada en el piso con mis brazos apoyados en mis piernas, siento mis ojos hinchados, exhaustos, pesados y junto a esto me sigue un ardor insoportable, entonces me doy cuenta que eh estado llorando durante un largo rato, aunque no estoy segura de cuánto tiempo. Pero por mis síntomas presiento fueron suficientes horas para lograr secar de toda lubricación cada centímetro de mis pupilas que ahora piden un descanso a gritos.

No sé dónde estoy, todo a mí alrededor está cubierto de una entera negrura ni siquiera el leve reflejo de la luna asomándose desde una pequeña ventana del lugar donde me encuentro, me ayuda a orientarme. Me pongo de pie para buscar algo que pueda encender el foco que cuelga del techo desnudo, pero al intentar pararme algo me lo impide, vuelvo a intentarlo pero no puedo, es como si mis piernas no respondieran a la orden dada desde mi cerebro, sin otra opción me impulso utilizando mis manos pero al apoyarlas en el suelo siento que estás tocan un liquido de consistencia un tanto viscosa y espesa regada en el piso, llamando poderosamente mi atención, despertando mi curiosidad por averiguar de dónde proviene. Me quedo paralizada cuando deduzco que estoy sentada sobre algo proveniente de mi vientre. Grito, grito tan fuerte desgarrando mi garganta, no me importa solo no puedo parar de gritar, mi pecho sube y baja sin descanso. Estoy aterrada, muerta de miedo y no solamente por mí, estoy aterrada por qué no se si mi bebe y yo podremos sobrevivir…

Me despierto sobresaltada… agitada, mi pecho esta bañado en sudor. Enciendo la luz de la lámpara de mi mesa de noche y tomo el vaso que esta junto a ella, bebo un sorbo de agua para intentar tranquilizarme, pero ese sentimiento de angustia y miedo vienen sin pedir permiso. Sin pensarlo dos veces, toco mi vientre.

-Mi bebé está bien, - susurro para mí misma, mi voz es angustiada y mi respiración agitada - sólo fue un mal sueño, una terrible pesadilla.Aunque siento que mi vida, no está muy lejos de ser la pesadilla que siento.

Mis padres se negaron a darme una explicación sensata de su engaño sobre mi embarazo, solo dijeron que querían lo mejor para mi, con excusas pretendieron convencerme de que era muy joven para ser madre, me suplicaron les prometiera pensarlo, expresaron que si mi deseo era tenerlo podía meditar darlo en adopción al nacer a una familia dónde recibiría amor y atención, la cual yo, según ellos no estaba apta para proporcionarle.No pude responder a eso sólo me limite a retirarme a mi habitación sin decir nada, hundida en mi mutismo, absorta en consultar con mi voz interior por un consejo, una respuesta certera.
Tengo que hablar con Rodrigo, necesito verlo para contarle lo que esta pasándome, en el fondo tengo miedo de su reacción, me estremece pensar que podría abandonarme, dejarme sola a mi merced, pero también está la posibilidad que se ponga feliz, que al contarle la idea de mis padres, me apoye y me aliente a no hacerles caso, diciéndome que estaremos bien, que me prometa estar siempre conmigo, porque aunque lo asuste tanto a como a mí, piensa que nuestro amor podrá salir victorioso.

Dándome valor, pensando en cosas positivas, tomó el celular para marcarle sin siquiera detenerme a ver la hora.

Entre los tonos siento como mi corazón late nervioso ante la espera... Al cabo de varios llamados alguien me contesta del otro lado pero la voz que oigo no es ni en sueños la que pensaba oír...

-¿Diga?

Mis sentidos se alarman, esa voz no es de él, por el amor de Dios ni siquiera es de un hombre.
¡Es la voz de una mujer!, ¡Quién diablos ha contestado el teléfono!
La rabia me invade y aprieto mis puños con fuerza hasta que los nudillos se vuelven blancos. Estoy a punto de echar fuego por la boca. ¡Es hora de pedir explicaciones!, ¿Quién rayos es la mujer que me habla del otro lado?, ¿por qué tiene el celular de mi novio? Aprieto los labios con furia luego respiro hondo para a continuación preguntar...

-Soy Helena... ¿Quién habla?... y ¿por qué tienes el celular de mi novio?

Ella parece saber quien soy cuándo me dice...

- Helena, pero hola mujer...soy Bianca ya te paso a tu novio...Mi amor es para ti...
Me quedó helada ante sus últimas palabras... ¿Mi Amor? ¿Pero...¿Qué le pasa a esta mujer?... ¿Cómo llama así a mi novio?... Al instante escucho su voz y sin dejarlo decir nada más que…

- Yo te puedo explicar - lo interrumpo...

- ¿Me quieres decir con quien estas?, ¿Quien carajos es esa mujer?... ¡¡HABLA!!

7 comentarios:

  1. uhhh se le acabo la joda a Rodrigo ... agua y ajo querido... no debiste hacerle eso a Helena

    menos mal que fue una pesadilla lo de Helena, lo unico que espero que al bebe no le ocurra nada :(

    me encanto Lu, es muy buena la novela y si tienes talento mujer :D

    besos grande

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. si si agua y ajo para este infiel!!!!!...Gracias sol por tus palabras!!!

      Eliminar
  2. que mal rodrigo como as podido acerle esto a elena puff deseando el capitulo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. si pobre helena!!!!...pero rodrigo ya pagara!!!! besos Josefa!!!!!

      Eliminar
  3. La verdad es que a Rodrigo no lo soporto, si lo tengo delante le doy un par de hostias para que espabile.
    E gusta tu historia Lu, y me alegro que nos des la oportunidad de disfrutar leyéndola.

    ResponderEliminar
  4. jajaja este rodrigo necesita una dosis de su propia medicina me parece...gracias por tus palabras Marina me alegro muchisimo que te guste mi historia y no gracias a ti por dejarme contartela!!!! un saludo!!!

    ResponderEliminar
  5. Que fuerte para Helena y sigo leyendo...

    ResponderEliminar