sábado, 28 de junio de 2014

Giros de la vida...Capítulo 10 (Parte 2)

                                     Capítulo 10
         
Hace casi 40 minutos que observo la pantalla de mi celular vacilando entre llamarla o no, una mezcla de ansiedad y incertidumbre pelean con mi temor a que no responda, aunque también me preocupa no haber pensando una excusa convincente para justificar mi llamado. Sentado en mi coche soy consciente que mi arrebato de locura podría causar en Helena la idea de que mis intenciones van más allá de querer ayudarla aunque confieso que en parte es cierto, no quiero asustarla y que se vea obligada a pedirme la deje tranquila.

Al cabo de unos minutos de debate, me decido por marcarle no sin antes haber  respirado profundo y haberme convencido por ultima vez que hacía lo correcto. Buscó en mi teléfono los datos que copié del ordenador de jenna, esa pobre chica que engañe solo con el fin de obtener algo de información de la mujer que con solo haberme mirado mi corazón volvió a latir...

Marco su número sin siquiera volverme a cuestionar si es o no lo correcto, sé que si lo hago desistiría de mi plan. Así que dejando de lado mi inseguridad oprimo el botón de llamar, pero cuando estoy llevándome el aparato a mi oído el aviso de un mensaje me obliga a cortar para leerlo...

Fiesta en casa de un amigo, vamos y no aceptare un no como respuesta”

Scott

Refunfuño, maldiciendo a mi amigo por haberme frustrado mi plan pero también me doy cuenta de que necesito distraerme, ni siquiera eh aceptado del todo el abandono de Kathya así que tal vez salir un poco me ayude a cambiar de aires. Le respondo a Scott que no vemos en mi casa a las 9pm para irnos juntos ya que no se dónde es el sitio.

Sonrió al recibir su respuesta, la verdad que mi amigo sabe como hacerte sentir bien cuando todo tu mundo de esta cayendo...

Perfecto, al fin saldrás de tu cueva”.

Acto seguido enciendo mi carro y con un par de maniobras emprendo el viaje hasta mi casa.



Scott ha llegado puntualmente a buscarme, estoy terminando de alistarme cuando escucho la inconfundible voz de mi amigo del otro lado de la puerta.




-Zack Mckeinze!!!! por tu bien espero estés listo, no me obligues a tener que sacarte de ese cuarto a rastras...
Abre la puerta sin siquiera tocar, al verme listo su alegría aumenta y salta sobre mí como un tigre acechado a su presa.
  
 - Confieso que no te tenía fe , pero veo que me hiciste caso y vas a venir conmigo, hasta que te decidiste a salir de tu “depresión” - dice en un total sarcasmo-


-Tú no entiendes nada- me defiendo- porque para ti una mujer es solo de una noche- le recrimino- Por lo tanto no tienes idea de lo que es amar...Scott se ríe ante mi contraataque y se defiende al instante con una respuesta muy suya...


- Por lo menos yo no ando como tú, lamentándome porque mi novia me dejó...Al contrario tuyo mi querido amigo yo no me complico la vida...

En silencio reconozco que tiene razón, tal vez la solución sea ser como él, aunque ahora que Helena llegó a mi mundo no sé si no vuelva a caer en las redes del amor por segunda vez...Me quedó unos segundos pensando en ella, viajando de nuevo al momento en que la conocí, pero mi amigo me vuelve a la realidad...

- Eh!!!...que te paso???, en que piensas?...conozco esa cara y de seguro estas así por una chica...Dime quien es...

- Nada de eso- miento- me quedé analizando tu respuesta...pero bueno- digo cambiando el tema...Dime en que vamos...Tu coche o el mio?...

Scott finge creerme y yo respiro aliviado porque por ahora no quiero contarle de Helena, conociéndolo me dirá que no eh aprendido la lección y no me apetece oír sus regaños...

-Maneja tú, que eres el chico “No bebo alcohol, soy sano”- se burla-

-Soy sano por dos razones ...

-Si, si ya sé- me interrumpe- Tú padre y el deporte- responde frustrado - Aunque nada te haría una cerveza o un trago a veces no es malo divertirse un poco- sugiere-

-Tengo otras formas de divertirme, no necesito el alcohol...

La cara de mi amigo es un poema, me mira con la boca abierta y con los ojos como platos, me doy cuenta de lo que esta pensando y le corto la ilusión de un golpe...

- No es lo que piensas, así que deja de mirarme como si fuera un extraterrestre..mejor vayámonos antes de que me arrepienta...




Después de unas cuantas vueltas gracias a mi querido amigo que no recordaba donde quedaba la casa por fin llegamos, al estacionar el auto, puedo ver que ya hay un montón de chicos y chicas bailando y bebiendo afuera de la casa.



Todos parecen estar muy contentos y felices, se animan los unos con los otros a hacer locuras. Al entrar veo que un rincón hay un grupo de chicos que reconozco de la universidad haciendo competencia entre ellos poniéndose de cabeza sobre un barril de cerveza y bebiendo de él hasta que no aguantan más.

Seguimos adentrándonos entre la multitud, esquivando golpes de algunas peleas de aquellos que ya están muy tomados, caminamos por un largo pasillo viendo todo tipo de escenas, hasta que llegamos a la piscina de la casa dónde dentro hay otro montón de chicos con mujeres sobre sus espaldas que mueven sus brazos al viento al ritmo de la música.





Scott sigue adelante mientras yo lo sigo por detrás, hasta que escuchamos la voz de alguien a los lejos que lo llama a mi amigo de forma muy locuaz.

- Scott, amigo...llegaste, al fin viejo, creí que no vendrías...

Mi amigo se le acerca y veo como se saludan efusivamente dándose un fuerte abrazo, que rompen para que scott me presente...

-Zack, te presento a la persona de quien aprendí todo lo que se de mujeres … Profesor – Dice queriendo parecer serio- el es zack Mckeinze, el mayor anotador de touchdowns del equipo de americano de la universidad...- Alardea mi amigo-

- Mucho gusto, Zack yo soy Rodrigo Lewis y no le hagas caso a este chico que lo que aprendió de mujeres lo aprendió sólito...yo solo lo ayude..


- Un gusto Rodrigo....


Nos estrechamos las manos en respuesta sin darnos cuenta de que esa noche no sería una más para nosotros...


viernes, 27 de junio de 2014

Giros de la vida...Capítulo 10 (Parte 1)


                                   Capitulo 10:





Después de un día realmente agotador, llegó a mi casa, con el único propósito de irme a la cama y no levantarme de ella en muchos días, necesito sobre manera reponer energías, mi vida paso de tranquila a intensa en un abrir y cerrar de ojos sin permitirme siquiera asimilarlo, todavía no eh tenido tiempo de digerir todos los acontecimientos.

Mi cabeza esta tan saturada de información que si algo más llegara a pasar estallaría como una bomba nuclear, dejando solo los restos de una mujer a quien los giros de la vida hicieron añicos. Cuándo abro la puerta encuentro a mis padres en la sala leyendo un libro cada uno, sobre la pequeña mesa dos tazas de café humean airosas impregnando el espacio con su inconfundible aroma, provocándome una sensación de paz inexplicable en mi interior porque teniendo en cuenta los últimos sucesos más que paz debería estar internada por ataque de nervios y estrés. Cierro con sumo cuidado procurando no hacerme notar pero mis esfuerzos son en vano porque ni bien está llega a chocar con el marco de entrada, mis padres levantan al mismo tiempo la vista y poniéndose de pie como si algo los propulsara caminan hacia mi en un completo silencio que mi madre no puede aguantar y decide romperlo para decirme:


    - Hija...Volviste- dice mientras continua su acercamiento hacia donde estoy- ¿donde haz estado?, tu padre y yo estábamos preocupados por ti...

La miró como diciendo... “No te creo nada” ...pero la verdad estoy demasiado cansada para discutir por lo que me limito a un simple:

Estoy bien, solo necesitaba solucionar unas cosas. Ahora si me permiten quiero ir a mi habitación, hoy ha sido una jornada muy larga...

Mi madre hace el intento de objetar mi decisión pero mi padre la frena susurrándole detrás suyo un contundente:

      - Déjala...

Ella asiente bajando la cabeza, a la vez que deja salir unas lagrimas que ha contenido desde hace rato en señal de frustración. Esforzándome por no sentir lastima de ella, me doy media vuelta y absorta en un total mutismo subo las escaleras de camino a mi dormitorio.

Acostada en mi cama, doy vueltas tratando de conciliar el sueño pero hasta ahora mis intentos no han funcionado, creo que hasta morfeo me abandono. Entonces sin buscarlo o quererlo en chico que conocí en la universidad viene a mi mente, reflexiono en que tal vez sus intenciones eran buenas y me reprendo el haberlo tratado tan descortés pero siendo honesta la herida hecha por mi Rodrigo me duele en lo más profundo de mi ser y creo que nunca más volveré a confiar en un hombre y menos en mi estado actual porque seguro al enterarse me dejarían sin pensarlo...Aunque admito que Zack era un muchacho bastante guapo, su cabello rubio y sus ojos verdes junto a lo que parecía un cuerpo trabajado a la perfección le daban el toque perfecto para concluir en mi opinión que seguramente todas las mujeres del campus deben estar enamoradas de el.



Pero por algún motivo una voz en mi interior me grita que zack podría ser mi ángel de la guarda, ese pensamiento se apodera de mi con tal fuerza que me asusta por lo que lo aparto inmediatamente y me entrego a el mundo de los sueños que por fin ha llegado...




viernes, 20 de junio de 2014

Giros de la vida...Capítulo 9

B

                                               Capítulo 9:


             
  

La sonrisa en mi rostro es tan grande que siento podría iluminar con ella la cuidad entera, camino presuroso por los pasillos de la universidad dando pequeños saltos involuntarios que demuestran mi alegría ante mi triunfo. Aunque tuve que recurrir a mis encantos con la pobre chica de servicios escolares aprovechándome de que se muere por mí hace tiempo, solo espero que mi triunfo valga la pena.

Jenna es una mujer de unos 28 años, de cabello negro, delgada, ojos negros enmarcados con bastante delineador y amante de los tatuajes; pues a pesar de usar una camisa de mangas largas, ella se las sube dejando al descubierto algunos de sus dibujos.

Jenna


Al verme llegar casi se le cae el café cuándo iba a llevárselo a la boca pero en un acto reflejo por disimular su nerviosismo apoya la taza en su escritorio y fingiendo seriedad me pregunta.

-Zack McKenzie... ¿A qué debo el placer de tu visita?

-Jenna, mi dulce y tierna Jenna... - le digo apoyándome en el escritorio mientras le sonrió seductor amente... consciente de que eso la derribara. - Que guapa estas… más de lo normal si me permites el atrevimiento...

Ella sonríe tímidamente y puedo notar como sus mejillas se pintan de un intenso rojo, entonces sé que voy por buen camino...

-Necesito un favor... quisiera los datos de una chica llamada Helena... lo que sucede es que encontré algo que le pertenece y quisiera devolvérselo.

Jenna me mira un poco confundida, como si pensara que lo que acabo de decir es lo más ilógico del mundo, porque nadie devolvería algo que no es suyo, menos en esta escuela... razón suficiente para estar seguro que Jenna va a negarme la información.

-Mira Zack... por políticas de la universidad no debería darte ninguna información de los alumnos, porque como sabrás eso es privado y confidencial, podría perder mi trabajo si alguien se enterara...

Entonces por una fracción de segundo siento que mi petición será denegada... pero mi continuo coqueteo la debilita como la criptonita a Superman... y es cuándo me doy cuenta de que gane la batalla…

-Pero... tu propósito me parece muy noble, así que con la promesa de que no le digas a nadie voy a ayudarte... Dime como se llama esta chica.

Al terminar de oírla, suenan en mi mente los aplausos por mi triunfo, me siento como si hubiera anotado un touchdown en el último minuto para darle la victoria a mi equipo...
-Helena, solo sé que se llama Helena...

Por su expresión se que piensa que con eso no hace nada, me observa un poco enojada por estarla haciendo perder su tiempo buscando a una tal Helena entre todo el alumnado, pero suspirando tranquilamente, teclea en la computadora el nombre, del cual salen como unas 15 chicas llamadas así...

-Bueno Zack... tú dirás, quieres ir viendo una por una tu solo o prefieres que te ayude?

Noto en esa pregunta cierto temor a que la haga a un lado, pero como no quiero hacerla sentir mal…

-No, por favor si me ayudas, te lo agradecería mucho... nadie como tu conoce los expedientes – le digo con una sonrisa de medio lado la cual me responde inmediatamente.

Y entonces estoy feliz porque mi plan funcionó.

Pasamos unos valiosos veinte minutos pasando de un expediente a otro, de una carrera a otra, hasta que llegamos a Abogacía. Allí, como si me estuviera gritando, con una sonrisa esta Helena.





La chica que me ha robado el pensamiento desde que la vi.Jenna me deja observar el archivo en lo que atiende a otro estudiante de primero. Y aprovecho para anotar los datos en el móvil. Nombre completo, teléfono y dirección… Antes de que Jenna regrese paso al siguiente expediente y le digo que ya la encontré, simulo anotar su teléfono y me despido de ella con un guiño.

Ahora si, a encontrar a mi Helena.

martes, 10 de junio de 2014

Giros de la vida...Capítulo 8




                                        Capítulo 8







Me niego rotundamente a aceptar que este chico a mi lado realmente está interesado en lo que a mí me pasa, me resulta inaudita la idea de que alguien pueda siquiera tener un mínimo de compasión hacia mí. Después del engaño de Rodrigo me resulta extremadamente difícil creer en los hombres, con él se fueron todas mis ilusiones, mis sueños, mi idea del amor verdadero, se esfumó todo sentimiento de afecto de mi corazón, por eso me rehusó a contarle mi trágica historia, porque no quiero causar su lastima. Buscó desesperada una forma “elegante” de sacármelo de encima y creo que acabo de encontrar una relativamente “Sutil”.

-      Te agradezco mucho tu preocupación Zack, gracias por acercarte…Pero como ya te dije antes mi problema no tiene solución inmediata, es algo más bien que requiere tiempo y meditación para llegar a la decisión correcta. No quiero sonar grosera pero te pido por favor te retires, quiero estar sola, necesito espacio para acomodar mis ideas…

Él  me mira fijamente con sus ojos claros, me contempla con una mirada llena de curiosidad y es esa misma mirada la que me obliga a preguntarme si de verdad me habrá escuchado cuándo amablemente le dije: “Gracias pero déjame en paz”… Porque aún sigue aquí. Su mirada tan llena de intriga y preocupación me desconciertan y a la misma vez por alguna extraña razón también me da confianza, es como si en el fondo de mi alma algo me dijera que sus intenciones para conmigo son sinceras.

La razón y mi corazón debaten entre si haciéndome más complicado el momento. Por un lado siento que Zack podría ser la persona adecuada para desahogarme, para sacar de mi interior todo el dolor acumulado aunque también soy consciente de que él es hombre y como tal puede que al contarle mi situación se ponga del lado de mi ex argumentándome de ser yo la culpable de su tropiezo. Esto último me aterroriza de tal manera que al final optó por aferrarme al poco o mucho orgullo que me queda y vuelvo al ataque, aunque esta vez sueno más cortante y directa:
-      Vete, déjame sola, no necesito de ti ni de nadie para resolver mis cosas…

Cuándo termina de oírme presiento que quiere responderme, pues hace el amago de abrir su boca para objetarme, pero al segundo supongo se da por vencido y guarda su opinión para sí. Lo cual agradezco infinitamente porque ya no deseo escuchar más sermones de nadie, bastante tuve con las mentiras de mis padres, el engaño de Rodrigo, la hipocresía de su amante para además tener que soportar los de este desconocido.

Entonces sin nada más por decir, Zack se pone de pie y se va por donde vino...

                            **************************************

Definitivamente las mujeres y yo no nacimos el uno para el otro, no sé quién sea el del problema aunque para ser honesto me parece que ellas se llevan su parte de la culpa. Se complican mucho, tanto como para volver loco a cualquiera, no las entiendo, se la viven diciendo que su hombre ideal tiene que ser aquel capaz de escucharlas, mimarlas, apoyarlas, una persona que siempre este cuando lo necesiten, pero cuándo uno hace lo posible por ser como ellas quieren, en vez de aprovecharlo, te desprecian tratándote como si fueras el malo de la película. 

Motivo suficiente para asumir que Helena está completamente desquiciada, esa mujer no necesita a nadie en su vida, bueno o quizá puede que quien sea que la puso así era muy importante para ella y ahora el dolor no la deja ver más allá. Esta teoría no me resulta ilógica tanto que presiento es lo más probable, entonces es cuándo una idea viene a mi mente…

Ya sé que voy hacer para que esta chica confié en mí...-

miércoles, 4 de junio de 2014

Giros de la vida...Capítulo 7


                   
  

                          Capítulo 7:

 Con mucho cuidado para no asustarla, me voy acercando poco a poco a ella que llora, llena de angustia y sentimiento, provocando en mi interior la necesidad de protegerla, cuidarla, y de secar con mi puño las lágrimas que corren por sus mejillas. Cuándo  llegó a su lado, me agacho frente a ella y tomo sus manos y las aparto de su cara. Al darse cuenta de mi presencia, se sobresalta y levanta su cara para que pueda verla por fin por completo, Simplemente quedo maravillado ante lo hermosa que es, porque aún con sus ojos rojos e hinchados me parece la mujer más bella de todas, incluso en ese breve momento me olvido de todo el drama amoroso que me rodea. 



-Disculpa- Digo en voz baja - No quiero molestarte, pero te escuche llorar y me preocupe… ¿Puedo ayudarte?- le preguntó y en ese momento me doy cuenta que ni si quiera me he presentado - por cierto… Soy Zack.

Se queda en silencio unos segundos como tratando de asimilar lo que escucho, es como si le costara creer que alguien podría preocuparse por ella… y eso me desconcierta bastante porque me resulta casi impensable el hecho de que haya quien pueda ignorarla o hacerle daño… porque aún sin saber el motivo de su tristeza me parece una chica muy tierna y dulce.

Su aspecto refleja que no es como las tantas chicas que estudian aquí, pues puedo darme cuenta de que no pasa horas frente al espejo llenándose de maquillaje, joyas y ropa ajustada. Al contrario su vestuario es bastante simple, shorts grises, una blusa de flores y zapatos bajos las demás estudiantes, suelen pasarse el día entero en sus plataformas de colores llamativos, una moda que se ha extendido por todos lados, salvo claro en ella… Me siento a su lado cautelosamente, en silencio para no intimidarla, entonces rompe con la tranquilidad que reinaba sobre nosotros…

-Hola- dice a la vez que se limpia las lágrimas con sus manos- Agradezco tu preocupación y tu interés, pero en esto que me pasa no hay quien pueda ayudarme… - deja escapar un sollozo y se le humedecen los ojos nuevamente.

-En este mundo, todo tiene una solución… no hay nada que no se pueda arreglar, yo sé que no me conoces pero, quiero decirte que si necesitas un amigo o un desconocido, que te escuche puedes contar conmigo…Sabes…A veces en bueno hablar con otro sobre los que nos pasa…

-¿y tú… que eres psicólogo?...Te aseguro que este problema, es de esos que no tienen solución o más bien que hay que meditar muy bien que hacer…Por cierto…Yo me llamo Helena…por eso te pido de la manera más atenta que me dejes sola, no quiero hablar con nadie…

Esas palabras transitan tan rápido por mi mente que no me da tiempo a asimilarlas, tan solo me doy cuenta que lo mío no es tratar con las mujeres, parece que no nacimos el uno para el otro, pero en este caso algo me obliga a no ceder a su petición, no soy capaz de irme y dejarla sola…

-Lo siento… como dije antes no quiero molestarte, pero tampoco puedo irme y dejarte sola, no en este estado… Así que voy a quedarme aquí a tu lado, puedes desahogarte tranquila no te preocupes pero si necesitas conversar solo tienes que decírmelo…

Mientras me mira sorprendida, reflexiono para mis adentros diciéndome que a veces la vida puede dar giros en dirección al abismo pero también puede ponernos enfrente a alguien mucho mejor… y algo que dice que Helena puede ser mi giro.